Debido a sus excelentes prestaciones térmicas y su diseño específico, está especialmente indicado para aislar los frentes de forjado y pilares en edificios con estructura de hormigón armado y aislamiento por el interior, minimizando los puentes térmicos que se forman en el encuentro de la fachada con el forjado, así como en los pilares integrados en fachada.
Con formatos disponibles para varias posibilidades de aplicación en función de la tipología y revestimiento de la fachada:
- Para aplicar revestimiento continuo de mortero directo sobre el aislante.
- Para revestir con rasilla cerámica por delante del aislante.
- Para revestir con plaqueta de ladrillo caravista por delante del aislante.
Se puede colocar antes del proceso de hormigonado de la estructura, fijado (clavado o pegado) al elemento de encofrado (tabica), o bien, fijado a la estructura desencofrada, mediante combinación de fijación mecánica y mortero adhesivo.